domingo, 7 de enero de 2007

Presidente de la Agrupación



La vida es muy peligrosa, no por las personas que hacen el mal, sino por aquellas personas que se sientan a ver que es lo que pasa

Luego de la extrema vivencia que me llevó a colapsar e intentar suicidarme dentro de las instalaciones de Isapre VidaTres en la ciudad de Temuco, el pensamiento de Albert Einstein abrió mis ojos y mi corazón para reflexionar que mientras más grandes sean las dificultades que la vida nos presenta, más grande podemos ser como personas, siempre que tomemos la decisión de no quedarnos sentados a ver que es lo que pasa con nuestro prójimo y con nosotros mismos. Las puertas sólo se abren para quien gira el picaporte. Si no escalas la montaña no podrás disfrutar el paisaje. El que acepta muchas cosas fácilmente, con seguridad tendrá muchas dificultades. Es difícil salvar a quien no quiere salvarse del todo, pero aun es más difícil salvar a quien sólo quiere salvarse a medias.

Nuestra agrupación de enfermos, es la primera organización a nivel nacional que denuncia las irregularidades y demoras existentes en el pago de las licencias médicas por parte de las Isapres y de la Compin. Estamos a la espera de las miradas de nuestros parlamentarios para mostrarles que ninguna Compin, a nivel nacional, cumple con la ley que regula el pago de las licencias médicas y por otra parte las Isapres tienen adjudicado el derecho legal de ser juez y parte en la reducción, rechazo o pago de una licencia médica. Los atrasos en los pagos de las licencias médicas son excesivos, inexplicables y vergonzosos. Muchos trabajadores no pueden terminar sus tratamientos por falta de dinero, teniendo que reintegrarse enfermo a sus labores lo cual contrae eventuales despidos por la baja en su productividad.

Es Necesario que nuestras autoridades modifiquen la ley que regula el pago de licencias médicas, la ley de Isapres y que reestructure a la Compin.

Próximamente nuestro trabajo seguirá en Santiago y Valparaíso, nuestro abogado realizará los trámites legales correspondientes para que nuestros parlamentarios nos den soluciones concretas. No debemos olvidar queridos ciudadanos de nuestro país, que en las futuras votaciones su decisión de votar puede mejorar los destinos de nuestro país.

Por último, quiero enviar un especial saludo a todos los chilenos y me despido solicitando su apoyo a nuestra noble causa. Si no ha vivido los problemas que usted verá en nuestro sitio en Internet, puede llegar a vivirlos tan crudamente como lo hemos vivido muchos enfermos de nuestro país.

El triunfo no está en vencer siempre sino en nunca desanimarse.

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